viernes, 4 de mayo de 2007

Promiscuidad, bisexualidad y libertinaje

Últimamente en la lista de correo de Opción Bi se están tratando cosas muy interesantes. Os pego parte de un mail de Natalia Anaya:

"El sexólogo J. L. Alvarez Gayou dice que la definición de promiscua es "aquella persona que tiene más parejas que yo" y con ello nos habla de lo resbaladizo del término. Creo que se podría jugar con la misma idea diciendo que "Libertinaje es aquello más libre que lo que me permito a mi mismx". Ambas palabras han tenido un sentido peyorativo o mejo dicho negativo, moralista, controlador y desde una perpectiva de quienes se preocupan por vigilar que se cumplan las buenas costumbres y las normas hegemónicas sexuales y de género.
Yo he sido una promotora de que se resignifique la palabra promiscuidad y otras más como puto, puta, putería, bisexual, mujer, hombre, etc. De la misma manera en que en inglés haya quienes están reivindacondo la palabra queer que tenía tambi´ne un sentido negativo. Durante mucho tiempo dije que mi preferencia sexual era la promiscuidad y que me sentía muy orgullosa de ser una promiscua irreverente. También puedo decir que soy una libertina (de llibertinaje eh) muy feliz y orgullosa de serlo y hasta invitaría a otras personas a vivir un delicioso libertinaje responsable, sí responsable porque claro que se puede ser libertinx y ser responsable. Estoy convenida que los siginificados de las palabras se pueden deslizar por un continuo maravilloso de apropiaciones y empoderamientos, como actos conscientes y deliberados en aras de recuperar nuestros cuerpos, nuestros deseos y nuestras identidades. Las palabras son nuestras."

Os dejo con la inspiración. A mí, desde luego me ha inspirado mucho.

Para el hilo completo, mirad aquí.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Qué pena que no se pueda ver el hilo completo! Pues lo que dice Natalia está lleno de sentido común. Me parece bien reivindicar las palabras manchadas por abyectos moralistas. Durante un tiempo, para negar la democracia, el padre fundador del PP decía que una cosa es la libertad y otra el libertinaje. Como si fueran cosas distintas. En realidad se sienten molestos por prácticas de libertad que a ellos, por el motivo que sea, no quieren ejercer. Pero eso es la libertad, que cada uno haga o deje de hacer lo que quiera. Pero saben muy bien lo que hacen. Saben que el lenguaje es el primer campo de batalla de las ideologías, y por eso manchan las palabras. Y por eso mismo estoy de acuerdo en su reivindicación. Quitar la carga negativa que han adherido a las palabras hasta que nadie pueda llegar a sorprenderse de que un libertino pueda también ser una persona responsable y de confianza.

Alcibiades

Maeve dijo...

Sí, en realidad todo se basa en la idea de que es más difícil probar que no eres algo que decir que la acusación en sí no tiene sentido. Además, si utilizamos la lógica de quién nos domina dificilmente podremos nunca ser otra cosa que abyect*s. Necesitamos hacer nuestro propio lenguaje. Las palabras son nuestras!

Maeve dijo...

Ah, y el link ya está disponible. Es a mi otro blog www.malabollo.blogspot.com

Janoengels dijo...

yo soy ateo pero no se como carajo escapar del enfermizo cristianismo de mi pais, que controla y reprime los cuerpos. Saludos desde Chile.

Maeve dijo...

Jan, te entiendo. Pero no hay que desesperar. La chica que escribió eso es de México, que también es un país ultracatólico...