domingo, 3 de febrero de 2008

Poliamor

He vuelto después de mucho tiempo a leer los correos del grupo poliamor del que formo parte y he visto que de repente vuelve a haber conversaciones interesantes. Copio una aportación de Luis:

"...las personas normalmente construyen su identidad (su yo) fundados en la pareja que poseen, en la casa, en el auto, y otros objetos, en reconocimientos, gratitudes, o expresiones de otros. Lo cual en gran medida es inconsciente, e impulsado por pensamientos, deseos, y lógicas dominantes; entre ellos el paradigma de la monogamia y el idividualismo, que busca la construcción de ese castillo personal en torno a una pareja, en forma total y absoluta. El celo resulta no por una disminución del amor sino por la destrucción de la identidad de la persona (dicen: sin ti ya no soy nada). Lógicamente entre más dependiente sea la identidad de alguna persona u objeto mayor es su susceptibilidad al sufrimiento, y entre más independiente y plena en sí misma, tendrá mayores posibilidades de recrear sus propias virtudes para sí y para los demás.

Como podemos entonces imaginar, la práctica del poliamor debiera implicar una construcción identitaria independiente y plena. De tal manera que las personas al relacionarse afectivamente, compartan entonces su afecto, pero no se cuelgan o agrarran del afecto del otro/a para ser. De esta manera es comprensible el concepto poliamoroso de "compersión" (el alegrarse por los amores de mis amores), pues no destruye la identidad personal, sino recrea la virtud amorosa, en la plenitud de los involucrados. Esta construcción identitaria es posible solamente por un proceso consciente de deconstrucción, (una continua destrucción y reconstrucció n) de nuestra identidad para hacerla consciente de la substancia que la crea y recrea, y en esos intentos, posiblemente logre expandir su propia virtud. En esta suerte de individuos (virtuosos en si) su relación poliamorosa es verdaderamente amorosa, donde el dolor o el celo es inexistente."

No hay comentarios: